– Un inversionista arriesgado en bienes raíces busca oportunidades de alto rendimiento, dispuesto a asumir riesgos significativos.

– Se inclina hacia proyectos especulativos y de alto potencial de crecimiento, incluso en ubicaciones menos probadas.

– Busca maximizar ganancias a corto plazo a través de estrategias como la compra, mejora y venta rápida de propiedades.

– Este perfil tiende a tener mayor tolerancia al riesgo y puede explorar opciones financieras más agresivas.

– Su enfoque principal es la obtención de beneficios significativos, aunque está consciente de la posibilidad de pérdidas.